Ante la actual crisis energética y climática, los diferentes agentes del País Vasco apuestan por una transición energética basada en energías renovables. Sin embargo, los principales proyectos de energías renovables que se han propuesto desde las instituciones en los últimos años han suscitado polémicas. Un equipo científico ha observado el conflicto y analizado los discursos sociales en torno a las transiciones energéticas en el País Vasco, y ha identificado las claves para solucionar el problema.
Las actuales crisis globales están provocando rápidas transiciones energéticas en muchos territorios, lo que ha generado numerosos conflictos en los últimos años. En vista de la creciente polarización de discursos y posiciones, el equipo científico se ha reunido con varios agentes sociales de Euskadi y Navarra y ha analizado los tres posicionamientos principales: el ecomodernismo, el que aboga por el decrecimiento y/o el ecofeminismo y el llamado green new deal. En busca de una solución, han identificado los matices que presentan los discursos globales del País Vasco:
El discurso ecomodernista prioriza el buen posicionamiento del País Vasco en el mercado de las energías renovables y hace hincapié en la necesidad de que la producción se haga en nuestro territorio. Con un enfoque productivista, apuesta por el mantenimiento del sistema socioeconómico actual.
Los discursos del decrecimiento y del ecofeminismo, sin embargo, no se limitan a una mera transición energética, sino que apuestan por una profunda transición ecosocial. Se apartan de la lógica mercantilista y priorizan la preservación de las zonas rurales y la biodiversidad. Se oponen a los grandes proyectos energéticos y a la privatización, y apuestan por un sistema de generación energética descentralizado y local.
La corriente green new deal, a medio camino de las otras dos, tiene un discurso pragmático cuya clave es una transición rápida y sus prioridades la descarbonización y la electrificación. Tiene por objeto la reforma del sistema socioeconómico sin apostar por la desindustrialización. Considera que el modelo descentralizado de producción energética es insuficiente para dar respuesta al consumo energético actual.
Dado que los tres discursos chocan en varios ámbitos, el equipo investigador considera necesario llegar a un consenso de mínimos en torno a los principios básicos. Se han identificado varias claves: (i) la necesidad de consensuar la naturaleza y el alcance de la transición; (ii) con relación a la justicia, donde se enmarca el debate de la deuda ecológica para con el Sur Global y los desequilibrios que se producen entre las provincias, regiones y comarcas del País Vasco, análisis de los impactos que se producen principalmente en el medio rural y en la montaña; (iii) la consideración de los diferentes colectivos y sus necesidades en las decisiones; (iv) la equidad, donde se deben debatir las políticas de compensación, la distribución de beneficios y la propiedad de la energía; (v) la concertación de hábitos sociales y modelos socioeconómicos centrados en los modos de vida sostenibles; y (vi) el fomento del debate sobre la propiedad y la gestión energética en relación con los nuevos modelos de gobernanza.
El equipo investigador propone crear espacios de debate seguros entre las instituciones y los agentes sociales, que permitan consensuar los seis ámbitos mencionados y avanzar en la transición.

